Precursores de la educación dominicana
Durante su historia, La República Dominicana ha tenido una serie de educadores que han contribuido al desarrollo de su educación y que han trascendido a nivel nacional e internacional gracias a sus aportes hechos a esta área.
Félix Evaristo Mejía trató de integrar a la educación dominicana los conocimientos adquiridos bajo la dirección de Hostos, los que obtuvo previamente en su exilio en Venezuela y en los viajes que realizó a Puerto Rico, Estados Unidos y Europa. El sistema de enseñanza implantado por él era considerado académicamente muy exigente y fue ejemplo de coordinación científicamente planificada, ya que fue el primer intento registrado en la historia de organizar la educación centrada en el educando, bajo un sistema de enseñanza más didáctico y menos verbalista.
Se han destacado no sólo por ser educadores, sino también por aportes materiales y por reformas educativas hechas para el desarrollo y la puesta en igualdad de la educación. La República Dominicana contó con grandes educadores que contribuyeron al desarrollo de la educación del país.
Entre los educadores que entregaron su vida al desarrollo de la educación están:
Eugenio María de Hostos
A pesar de ser de origen puertorriqueño Eugenio María de Hostos contribuyó grandemente a la educación dominicana.
Este gran educador, fundó en nuestro país la Escuela Normal Preparatoria en el año 1880, dando origen a las Escuelas Normales en la República Dominicana, esta escuela estaba dedicada fundamentalmente a la preparación de nuevas generaciones de profesores, educadores jóvenes en base a ideas pedagógicas y políticas que eran sustentadas por él y por sus ideales.
Aunque fue el fundador de estas escuelas, Hostos no fue su director hasta el año 1900 donde regresa al país tras haberse ausentado por once años. Fue además, Inspector General de Instrucción Pública y en el desarrollo de esta labor creó en el interior del país escuelas primarias técnicas y crea las escuelas bachilleres para preparar académicamente a los futuros alumnos del Instituto Profesional. Los graduados de las escuelas normales tenían el deber de servirle al país durante 5 años luego de haberse graduado.
Hostos tenía unos ideales sobre la educación bien marcados y fue inspiración de otros educadores. Él creía que la educación debía ser de carácter objetivo y que tenía que centrarse en el educando y sus intereses.
Eugenio María de Hostos no sólo contribuyó en la educación dominicana, sino que también fue precursor de la educación en todo el Caribe, Latinoamérica y en Estados Unidos. Ilustre personaje de la educación que será recordado siempre por sus aportes a la educación y por sus ideales sobre la misma.
Docente, poetisa, madre y esposa dominicana quien en sus últimos años de vida se dedicó a la tarea de mejorar la educación de las mujeres en República Dominicana.
Hacia los años 1800 en la República Dominicana las mujeres no tenían derecho a la educación, sólo los hombre podían disfrutar de este beneficio por lo que ella decidió terminar con esto fundando el primer centro de educación superior para mujeres, llamado Instituto de Señoritas el 3 de enero del año 1881 y tan sólo 5 años después, se realizó la primera investidura de este centro.
El 12 de abril del 1887 fueron investigadas las primeras seis educadoras formadas en las aulas de este Instituto: Leonor M. Feltz, Mercedes Laura Aguilar, Luisa Ozema Pallerano, Ana Josefa Puello, Altagracia Henríquez Perdomo y Catalina Pou. En diciembre del año 1888 se celebró la segunda investidura de maestros, en la cual se invistieron: Eva Pellerano, Mercedes Echenique Peláez, Encarnación Suazo, Altagracia Peguero Acevedo, Carmen Julia Henríquez Perdomo y Altagracia Henríquez Bello.
En 1890 sustituyó a su maestro Eugenio María de Hostos en la dirección de la Escuela Normal. Desde la dirección y más tarde como superintendente general de enseñanza, Félix Evaristo tuvo la oportunidad de contribuir con sus ideas al progreso de la educación dominicana, durante el periodo de violencia, precariedad, angustia y desesperación que atravesaba la República Dominicana durante la agresión que recibía de Estados Unidos. La organización escolar de la época y su relativa expansión se debió en gran parte a la actividad de este docente guiado por Eugenio María de Hostos.
Aunque fue el fundador de estas escuelas, Hostos no fue su director hasta el año 1900 donde regresa al país tras haberse ausentado por once años. Fue además, Inspector General de Instrucción Pública y en el desarrollo de esta labor creó en el interior del país escuelas primarias técnicas y crea las escuelas bachilleres para preparar académicamente a los futuros alumnos del Instituto Profesional. Los graduados de las escuelas normales tenían el deber de servirle al país durante 5 años luego de haberse graduado.
Hostos tenía unos ideales sobre la educación bien marcados y fue inspiración de otros educadores. Él creía que la educación debía ser de carácter objetivo y que tenía que centrarse en el educando y sus intereses.
Eugenio María de Hostos no sólo contribuyó en la educación dominicana, sino que también fue precursor de la educación en todo el Caribe, Latinoamérica y en Estados Unidos. Ilustre personaje de la educación que será recordado siempre por sus aportes a la educación y por sus ideales sobre la misma.
Salomé Ureña de Henríquez
Docente, poetisa, madre y esposa dominicana quien en sus últimos años de vida se dedicó a la tarea de mejorar la educación de las mujeres en República Dominicana.
Hacia los años 1800 en la República Dominicana las mujeres no tenían derecho a la educación, sólo los hombre podían disfrutar de este beneficio por lo que ella decidió terminar con esto fundando el primer centro de educación superior para mujeres, llamado Instituto de Señoritas el 3 de enero del año 1881 y tan sólo 5 años después, se realizó la primera investidura de este centro.
El 12 de abril del 1887 fueron investigadas las primeras seis educadoras formadas en las aulas de este Instituto: Leonor M. Feltz, Mercedes Laura Aguilar, Luisa Ozema Pallerano, Ana Josefa Puello, Altagracia Henríquez Perdomo y Catalina Pou. En diciembre del año 1888 se celebró la segunda investidura de maestros, en la cual se invistieron: Eva Pellerano, Mercedes Echenique Peláez, Encarnación Suazo, Altagracia Peguero Acevedo, Carmen Julia Henríquez Perdomo y Altagracia Henríquez Bello.
Felix Evaristo Mejía
En 1890 sustituyó a su maestro Eugenio María de Hostos en la dirección de la Escuela Normal. Desde la dirección y más tarde como superintendente general de enseñanza, Félix Evaristo tuvo la oportunidad de contribuir con sus ideas al progreso de la educación dominicana, durante el periodo de violencia, precariedad, angustia y desesperación que atravesaba la República Dominicana durante la agresión que recibía de Estados Unidos. La organización escolar de la época y su relativa expansión se debió en gran parte a la actividad de este docente guiado por Eugenio María de Hostos.
Félix Evaristo Mejía trató de integrar a la educación dominicana los conocimientos adquiridos bajo la dirección de Hostos, los que obtuvo previamente en su exilio en Venezuela y en los viajes que realizó a Puerto Rico, Estados Unidos y Europa. El sistema de enseñanza implantado por él era considerado académicamente muy exigente y fue ejemplo de coordinación científicamente planificada, ya que fue el primer intento registrado en la historia de organizar la educación centrada en el educando, bajo un sistema de enseñanza más didáctico y menos verbalista.
Creó una revista escolar titulada “la revista escolar” del periódico independiente “el centinela” en la cual exponía sus prédicas sobre la educación y aportó al área de Ciencias Sociales con investigaciones sobre la cultura y el desarrollo social de nuestro país. Actualmente algunos recintos del ISFODOSU llevan su nombre.
Juan Vicente Moscoso
En honor a este ilustre maestro fue creada en San Pedro de Macorís el recinto del ISFODOSU que lleva su nombre en 1956, con el propósito de formar maestros normales del nivel básico de la educación en esta provincia. Héroe invaluable de la llamada Independencia Efímera de 1822. Maestro de nuestro prócer Juan Pablo Duarte y Díez y de varias generaciones más.
Juan Vicente Moscoso Nació en Santo Domingo en 1773 . Hijo de Manuel Moscoso y de Doña Rosa Carvajal. En la Universidad de Santo Domingo obtuvo el doctorado en derecho canónico y derecho civil.
Desde joven desempeñó cargos públicos tanto dentro como fuera del país. Cuando en 1815 fue reinstalada la Universidad, se reintegró a la cátedra del Instituto civil, que había obtenido en propiedad y desempeñaba cuando la cesión de la misma.
Fue elegido por el Claustro como vicerrector de la Universidad en 1817, al segundo año del desempeño de sus funciones como vicerrector se le nombró rector de la misma institución.
En Cuba, tuvo a cargo las cátedras de Derecho Canónico y Derecho Civil en el colegio seminario, las cuales desempeñó hasta su muerte. En Cuba murió en el año 1887.
Inició su labor magisterial en plena adolescencia y con a penas 14 años de edad fue nombrada directora d e la escuela de niñas de Nibaje, en Santiago.
Nació el 7 de diciembre del año 1886 en la ciudad de Santiago de los caballeros, hija de Don José Pepín y la señora Edelmira Estrella. A los cinco años de edad quedó huérfana de madre y su abuela Carlota se encargó de velar por ella.
La familia de la que provenía Ercilia era muy influyente en la sociedad dominicana, por lo que recibió desde muy pequeña lecciones básicas de Ciencias Sociales, Ciencias de la Naturaleza, Francés, Matemáticas, Física y otras disciplinas, de mano del profesor italiano Salvador Cucurullo.
Bajo las instrucciones de Cucurullo aprendió con perfección y fluidez los idiomas italiano y francés. Desde pequeña, Ercilia mostró grandes habilidades para ser maestra y educadora por lo que recibió enseñanzas para desempeñar esta función.
Fue elegido por el Claustro como vicerrector de la Universidad en 1817, al segundo año del desempeño de sus funciones como vicerrector se le nombró rector de la misma institución.
En Cuba, tuvo a cargo las cátedras de Derecho Canónico y Derecho Civil en el colegio seminario, las cuales desempeñó hasta su muerte. En Cuba murió en el año 1887.
Ercilia Pepín
Nació el 7 de diciembre del año 1886 en la ciudad de Santiago de los caballeros, hija de Don José Pepín y la señora Edelmira Estrella. A los cinco años de edad quedó huérfana de madre y su abuela Carlota se encargó de velar por ella.
La familia de la que provenía Ercilia era muy influyente en la sociedad dominicana, por lo que recibió desde muy pequeña lecciones básicas de Ciencias Sociales, Ciencias de la Naturaleza, Francés, Matemáticas, Física y otras disciplinas, de mano del profesor italiano Salvador Cucurullo.
Bajo las instrucciones de Cucurullo aprendió con perfección y fluidez los idiomas italiano y francés. Desde pequeña, Ercilia mostró grandes habilidades para ser maestra y educadora por lo que recibió enseñanzas para desempeñar esta función.
Estas y otras experiencias le sirvieron de estímulo para que más tarde decidiera graduarse de maestra normal, en 1913, con mención honorífica, y on un jurado que consideró su tesis de “brillantísima”.
Basó su teoría educativa en los principios de Eugenio María de Hostos, en donde buscaba la objetividad de las cosas. Partiendo de ahí exigía a sus estudiantes belleza y orden en sus trabajos, creación de hábitos de estudio, creación de nuevas formas para enseñar a maestros, justicia social para los ciudadanos entre otras cosas.
Realizó cambios significativos en el sistema educativo de la época, reformando el programa oficial de escuelas primarias, agregando asignaturas como: Dibujo, Trabajos manuales, Geografía Evolutiva, Cantos Coreados, y Manejo de Globo y Mapas.
Basó su teoría educativa en los principios de Eugenio María de Hostos, en donde buscaba la objetividad de las cosas. Partiendo de ahí exigía a sus estudiantes belleza y orden en sus trabajos, creación de hábitos de estudio, creación de nuevas formas para enseñar a maestros, justicia social para los ciudadanos entre otras cosas.
Realizó cambios significativos en el sistema educativo de la época, reformando el programa oficial de escuelas primarias, agregando asignaturas como: Dibujo, Trabajos manuales, Geografía Evolutiva, Cantos Coreados, y Manejo de Globo y Mapas.
Instituyó el desayuno escolar; creó un laboratorio en el plantel donde trabajaba, impuso el uniforme escolar y exigía una actitud respetuosa cuando era interpretado el Himno Nacional.
Desde 1909 hasta el 1916, se dedicó a impartir clases privadas a grupos de jóvenes y señoritas, para formarlos como maestros normalistas y bachilleres en Ciencias y Letras, graduándose 250 maestros de enseñanza primaria.
Desde 1909 hasta el 1916, se dedicó a impartir clases privadas a grupos de jóvenes y señoritas, para formarlos como maestros normalistas y bachilleres en Ciencias y Letras, graduándose 250 maestros de enseñanza primaria.
Ercilia luchó para igualar los derechos de la mujer.
Hoy en día es recordada como una gran educadora que cambió el curso de la educación dominicana.
Hoy en día es recordada como una gran educadora que cambió el curso de la educación dominicana.
Bibliografía
- Educando. (2008). Ercilia Pepín, educadora.. 2018, de Educando Sitio web: http://www.educando.edu.do/articulos/docente/ercilia-pepin/
- Educando. (2006). Eugenio María de Hostos. 2018, de Educando Sitio web: http://www.educando.edu.do/articulos/estudiante/eugenio-mara-de-hostos
- Educando. (2005). Salomé Ureña, mujer, poeta, docente, madre y esposa. 2018, de Educando Sitio web: http://www.educando.edu.do/articulos/estudiante/salome-urea-mujer-poeta-docente-madre-y-esposa/
- Educando. (2011). Félix Evaristo Mejía . 2018, de Educando Sitio web: http://www.educando.edu.do/articulos/generico/felix-evaristo-meja/
- Educando.. (2005). Juan Vicente Moscoso. 2018, de Educando Sitio web: http://www.educando.edu.do/articulos/estudiante/juan-vicente-moscoso/
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